martes, 1 de octubre de 2019

Las cenizas del hierro (Verdes valles, colinas rojas, III), Ramiro Pinilla

Tercera y última parte de VVCR. El Hecho biológico se va imponiendo y los grandes inspiradores de esta macronovela van, poco a poco, muriendo: Cristina Oianindia, Ella, Camilo Baskardo y Roque Altube.

Mientras tanto, Asier Altube y sus amigos atraviesan las décadas más oscuras del franquismo en medio una represión que les va empujando, o al menos así lo sienten ellos, hacia posiciones radicales que acabarán, hacia el final de la novela, abrazando las tesis etarras, tanto en medios como en fines.

Gran novela, como las tres anteriores, aunque las últimas páginas se me han hecho un poco largas.

He percibido en la narración una inequívoca proximidad hacia la utilización de la violencia para obtener fines políticos de otra manera inaccesibles. Al menos, cuando Asier Altube y sus amigos piensan de esta manera, no hay ningún contrapunto a sus opiniones. ¿Estamos antes las opiniones del autor o simplemente ante una muy creíble creación literaria?

 Una vez finalizada la trilogía, sin animo de ser exhaustivo, anotaré algunas ideas:

 0. Imposible exagerar la ambición del autor y la brillantez literaria que en ocasiones alcanza.
 1. Su gran tamaño, casi 3000 páginas, hace inevitable la presencia de altibajos
 2. Obra valiosísima para comprender la idea que los vascos tienen de si mismos, de su tierra y de su relevancia política e histórica
 3. Obra igualmente valiosa para comprender la naturaleza política del PNV y el papel que desempeña en la sociedad vasca
 5. Pinilla inventa el realismo mágico a la vasca. Y el invento vale la pena.