Hacía tiempo que quería leer esta novela. Premiada y reconocida por la crítica.
Me ha decepcionado un poco. Desde luego es una gran novela. Pero, en mi opinión, tiene un gran defecto: de las 1008 páginas le sobran, al menos, la mitad.
Ramiro Pinilla nos cuenta una historia muy interesante. Y nos la cuenta muy bien. Pero el estilo de Pinilla es excesivamente moroso. Se recrea y da vueltas intentando contar la historia de una manera original. A veces, su estilo me recordaba al de Javier Marías.
La historia es la de la confrontación entre el tradicionalismo vasco y la apertura. Esta confrontación se articula en torno a varios conflictos: tradición frente a progreso, agricultura y ganadería frente a industrialización, conservadurismo frente a socialismo, país vasco frente al resto de España...
Interesante, pero quizá no tanto como para dedicar las 100 horas necesarias para leer la trilogía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario