sábado, 27 de febrero de 2016

Libertad, Jonathan Franzen

Gran novela edificada sobre el triángulo, amoroso, sexual y vital formado por Richard, músico atractivo y amoral, Patty, exdeportista depresiva y oscilante, y Walter, activista y progresista a muerte.


Las novelas de Franzen, como las grandes novelas, no va de nada. Franzen nos coloca en un entorno geográfico y temporal, y tras  dotar de espíritu vital a sus protagonistas, los deja evolucionar ante nuestros ojos. Leyendo su novela y viviendo junto a sus protagonistas durante 800 páginas, además de disfrutar su muy agradable estilo, nos hacemos más sabios.


Sabios porque leer una novela ambiciosa y perfectamente acabada es lo más cerca que estaremos de vivir vidas que no son las nuestras.


Hay algo de Dostoievski en la capacidad de Franzen de plasmar sobre el papel la introspección de sus personajes.


Franzen nos mete en la vida de los Berglund, a ratos desagradable, a ratos incómoda, siempre interesante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario